Preparación: 30 minutos
Espera: 2 h 30 minutos
Horneado: 18-20 minutos
Total: 3 h 40 minutos
(más 20 minutos extra para que se enfríen)
Ingredientes para 4-5 unidades
90 g de leche
unas gotas de zumo de limón
190 g de harina de fuerza
90 g de harina de repostería
40 de azúcar
1 cucharadita de sal
1 huevo
1 yema de huevo
1 clara de huevo (para pincelar los panecillos)
15 g de mantequilla (a temperatura ambiente)
5 g de levadura
aceite
semillas de sésamo u amapola para decorar (opcional)
Preparación
Activamos la levadura disolviéndola en un vaso con un poco de agua templada (no caliente, pues mataría las levaduras) y una pizca de azúcar y reservamos.
Metemos en el vaso de nuestra Thermomix la leche y el zumo de limón y mezclamos 4 seg/vel 2.
Dejamos reposar unos cinco minutos aproximadamente hasta que la leche se corte.
Añadimos las harinas, el azúcar, la sal, el huevo y la yema y amasamos 5 minutos a velocidad espiga.
Añadimos la mantequilla y la levadura y amasamos 3 minutos a velocidad espiga.
Engrasamos un bol de tamaño grande con aceite (para que la masa fermente en el).
Cuando nuestra Thermomix nos avise de que ha terminado retiramos la masa del vaso y tras formar una bola con ella, la depositamos en el bol engrasado que cubriremos con film transparente.
Esperamos durante aproximadamente una hora y media a que la masa duplique su tamaño.
Antes de comenzar el siguiente paso preparamos la bandeja de hornear cubriéndola con papel de hornear y espolvoreándola con harina.
Ponemos la masa sobre nuestra superficie de trabajo previamente espolvoreada con harina y la aplastamos bien para que salga todo el aire.
Dividimos la masa en cuatro o cinco partes iguales y les damos forma de bola, poniéndolos sobre la bandeja. Cubrimos con un paño de cocina humedecido y dejamos fermentar durante una hora aproximadamente (yo no los cubrí con el paño humedecido, simplemente los dejé fermentar al descubierto).
Precalentamos el horno a 190 ºC.
Transcurrido el tiempo de fermentado, batimos la clara de huevo que nos queda y con ella pincelamos la superficie de los panecillos, decorándolos con semillas de sésamo o amapola y horneamos durante 15-18 minutos, hasta que estén bien dorados.
Es conveniente dejar enfriar los panes antes de su consumo (mínimo 20 minutos)
